miércoles, 6 de marzo de 2013

Mi terribilitá....

Un día como hoy, hace muchísimos años, allá por 1475, nació en Caprese el escultor de mi alma y mi personalidad, ese que gesto a gesto forjaría mi particular personalidad...el que me hace disfrutar, soñar, emocionarme como lo hago con pocas cosas, ese que lleno mi vida de esculturas, de imágenes de Firenze, la ciudad soñada.....hoy nació mi Michelangelo...

Muchas veces le he nombrado, siempre está en mi pensamiento, en mi día a día, presentes sus obras en todas las paredes de mi habitación (El David, Moisés, Cristo Sopra Minerva, la Capilla Sixtina, el Juicio Final), presente en el fondo de mi whatss app, presente en el comedor con una estatua que me regalo mi padre de El David (reconocí su pelo al tacto del envoltorio cuando me lo trajo), presente en otra estatua de Moisés que tengo en la habitación...presente, presente y presente desde que leí mi primera biografía sobre él en la biblioteca de mi Colegio, el Ortega y Gasset...La primera de muchas biografías, de esas que penetran en el alma, que te hacen sentir especial, diferente y que te acercan a esas personas maravillosas que vivieron en el pasado..

Recuerdo vagamente mis sensaciones cuando vi por primera vez El David en una diapositiva en el cole,  me emocioné tanto, me pareció tan grandioso, tan maravilloso, con esa mirada dura, desafiante pero a la vez tan, tan vulnerable, con esas manos dignas de ser acariciadas, con ese dulce rostro, ese pelo rizado, ese saber estar, esa espera para luchar, para defenderse de los enemigos....reconozco que tengo debilidad por esta escultura, por encima de las demás, por encima de la Capilla Sixtina...y curiosamente es la escultura con la que traicionó a la familia que más amo, a los Médicis...Ese David que representa todo lo que es él, la libertad, la altivez, la belleza interior, su maravillosa personalidad (pese al mal carácter, que lo tenía, eso me suena a alguien más...), representa la libertad de Florencia frente al enemigo exterior, esa República de Soderini....tantos años a la intemperie, los ataques sufridos, pero ahí sigue, maravilloso, digno, perfecto (o casi perfecto, demasiado estrecho visto de perfil, pero no había más mármol, quizás las manos y los brazos demasiado largos, quizás los atributos escasos...pero qué importa si el conjunto es maravilloso, si irradia belleza y amor...)

Michelangelo bebió de las fuentes del pensamiento neoplatónico de Marsilio Ficino, de Picco de la Mirandola, de una mentalidad que volvió a colocar al hombre en el centro de todo, por encima de Dios, que valoraba la figura humana, que debía ser retratada en toda su belleza, siempre figuras humanas, captadas en su esencia...Ese pensamiento que me trae de cabeza desde la adolescencia, el humanismo, que he abandonado, en parte, a favor de un caparazón más insensible, el humanismo forma parte de mi, se ha quedado dentro de mi, es mi esencia, pero ya no lo comparto con el resto de la humanidad...Cada una de sus obras están impregnadas de estas reflexiones, sobre todo las primeras obras y La Pietá del Vaticano, tan bella, tan etérea...el alma de ambos sale por el mármol, como una expresión del alma,  del profundo amor que sentía hacia su madre, de dolor de una madre al perder a su hijo..de esa imagen de madre joven y bella que tenemos todos en alguna parte de nuestra cabeza..cuando nos acunan entre sus brazos....

Michelangelo es una luz en la oscuridad de mi vida, lo ha sido desde siempre, en esos días grises y terribles en los que creía morir, cuando me fallaban las fuerzas, cuando decidí vivir mi dolor en soledad....consiguió llenar mis horas, mis instantes de su presencia, de su personalidad y poco a poco se fue metiendo dentro de mi como una droga y me hizo ver que mi único camino era la historia, estudiar historia, Florencia y él. Algo alejada parezco otra vez de estos pensamientos, pero los que me conocéis, sabéis que no tanto...Él tiene más de mí que mi Carlos, o más bien yo tengo más de él....siempre sensible, siempre maravilloso, leal a sus pensamientos, a sus sentimientos, a su familia...Carlos es el luchador, arenga a mi corazón, a mi orgullo de modernista e historiadora, en cambio Michelangelo es el que acuna mi alma, el que la sosiega, la calma y la enamora...

Le adoro, le amo, más de lo que podría expresar con palabras, está tan mezclado conmigo que a veces me confundo..eso sí, yo no he sacado su vena artística, no sé dibujar ni un patipato, pero la esencia está, su sensibilidad, su forma de pensar, su forma de aislarse del dolor por medio del carácter agrio, su soledad buscada y necesaria para sacar lo mejor de él, para la reflexión...Tal vez sea un alma gemela mía, tal vez sea al que más amo de toda la historia de la humanidad....Carlos llegó después y ocupa mi corazón, mi lado visceral, pero ese lado espiritual, etéreo, intangible lo ocupa irremediablemente mi Michelangelo....

Quiero que esta entrada sea corta, más breve que otras, porque oculto más de lo que expreso de mi relación con él..porque sacar todo a la luz, sería dejar mi alma desnuda, como desnudos son sus Esclavos, que sacan sólo una parte al exterior, ocultan y enseñan a la par....

Hoy nació uno de los mejores escultores de la historia, para mí el mejor, el que esculpió todo lo que soy y lo que seguiré siendo de por vida..Gracias por ser, gracias por existir, gracias por hacerme mejor...Termino mis reflexiones con un soneto suyo, tan lleno de matices, tan él y que he leído y extendido tantas veces...



Tú sabes que sé, mi señor, y sabes 
que me aproximo más para gozarte, 
y sabes que sé que sabes quién soy: 
¿a qué pues más retardo en saludarse? 
Si verdad es la esperanza que me das, 
y verdad mi gran deseo concedido, 
el muro rómpase alzado entre los dos, 
que son más fuertes los daños ocultos. 
Si sólo amo de ti, mi señor querido, 
lo que de ti más amas, no te enojes, 
si un espíritu del otro se enamora. 
Lo que en tu bella faz aprendo y busco, 
mal lo comprende el ingenio humano: 
Quien saberlo quiera, ha de morir entonces






2 comentarios:

  1. Pues sin tener ni idea de arte, debo decir que cuano vi la Capilla Sixtina y el Juicio Final... me quedé todo lo alucinada que me podía permitir en medio de tanto turista, también alucinado...
    Y en cuanto al David... pues que es digno de ser visitado, así como Firenze... más de una vez.

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  2. Muchas gracias por el comentario guapa...La verdad es que todo es una maravilla, el arte es una maravilla, la naturaleza, la música...Para mí Michelangelo es más que un artista....Impresionan todas sus obras, cada una a su manera....y qué ganas de volver a Firenze, esa ciudad soñada...

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